El turbocompresor:
El sistema consta esencialmente de dos ruedas de paletas, denominadas turbina y compresor, que giran solidariamente unidas por un eje en el interior de sendas carcasas independientes.
La carcasa de la turbina está comunicada con el colector de escape, mientras que la correspondiente al compresor conecta directamente con el colector de admisión. Los gases de escape, a su salida del colector y antes de ser expulsados al exterior, son enviados a la carcasa de la turbina debido a lo cual ésta comienza a girar a un elevadísimo número de revoluciones (más de 100.000 r.p.m). El compresor unido mediante un eje a la turbina se ve obligado a girar arrastrado a idéntico régimen de giro que ésta. Esto produce una sobrepresión en el colector de admisión por lo que el aire de admisión es impulsado hacia los cilindros a una presión superior a la atmosférica.
Gracias a esta sobrepresión conseguimos mayor densidad en el aire que introducimos en los cilindros.